Esté mes en el desafío de la cocina nos toca dulce y nuestra querida boss Toñi de ¿Qué se cuece en mi cocina? nos ha propuesto hacer tarta tatin o tartas invertidas. Yo me he decantado por la clásica tatin. El origen del pastel se remonta al siglo XIX. Cuenta la leyenda que la tarta tatin nació cerca de París en las cocinas del Hotel Tatin, dirigido por las hermanas Caroline y Stéphanie Tatin. Una de sus especialidades era la tarta de manzana. Un día con prisa, se olvidaron de colocar la masa en el molde y hornear las manzanas. Al darse cuenta del error, colocaron la masa sobre las manzanas caramelizadas. Y así nació la tarta tatin.
Buscando recetas me encontré con una de un pastelero francés Christophe Michalak.
Tradicionalmente, las manzanas se caramelizan en azúcar y mantequilla antes de hornearse con la masa encima. Christophe Michalak escalda las manzanasantes en agua, mantequilla, azúcar y vainilla. Quedan muy bien. Lo único que yo no le puse tanta mantequilla ni azúcar. Las haces en tandas y no hace falta tanta mantequilla ni azúcar.

Ingredientes:
250g de azúcar para el caramelo
8 manzanas
200g de azúcar
200g de mantequilla
200g agua
2 vainas de vainilla
1 masa de hojaldre
Mermelada de albaricoque para dar brillo (opcional).

Preparación:
Hacemos el caramelo. En un cazo ponemos los 250g de azúcar al fuego, sin remover el azúcar sólo moviendo el cazo hasta que caramelice. Vertemos en la base del molde.
En una cazuela ponemos el agua, la mantequilla en trozos, las semillas de vainilla y los 200 g de azúcar. Dejamos que hierva y se funda el azúcar y la mantequilla. Descorazonamos, pelamos y cortamos en cuartos las manzanas. Las vamos añadiendo a la cazuela en tandas, dejamos unos 8 minutos o hasta que estén blandas. Escurrir y sacar a un plato.
Cortamos el hojaldre un cm más grande que el molde y lo pinchamos para que no suba.
Vamos colocando las manzanas en el molde con el caramelo, bien apretadas; que no quede ningún hueco. Cubrimos con la masa de hojaldre. Horneamos en horno precalentado a 180ºC unos 30 minutos. Sacamos del horno, dejamos que se entibie para poder desmoldarla dándole la vuelta. Pincelamos con un poco de mermelada para darle brillo. Se come tibia (pero fría esta estupenda también).

Si quieres ver las recetas de mis otros compañeros del desafío, visita el blog DESAFÍO EN LA COCINA

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